Hace algunas semanas, desperté con la triste noticia de la
muerte de Eddie Van Halen a la edad de 65 años producto de un cáncer a la
garganta que lo aquejaba; y si bien era algo que podía ocurrir, producto de la
adicción frenética al tabaco por parte del mismo; su partida deja una perdida
invaluable en el mundo del Rock.
En el último tiempo, Van Halen se presentaba con cierta
regularidad tocando sus grandes clásicos, siempre y cuando, la salud de los
miembros de la banda pudiera mantenerlos de gira; aunque no mostraran nueva
música desde A Different Kind of Truth del año 2012 que pasamos a
reseñar.
En esta oportunidad, el disco en cuestión demoraría 14 años
en gestarse desde el paupérrimo Van Halen III, teniendo por misión (quizás…)
reivindicar el nombre de la banda de aquel mal recuerdo. Además, representaría la
vuelta al conjunto californiano de su histórico vocalista David Lee Roth,
que si bien venia trabajando desde 2007 con la banda, no había tenido la
oportunidad de grabar nuevo material con la banda.
Sería la figura del nuevo bajista de la banda, Wolfgang Van
Halen, hijo de Eddie y sobrino de Alex, quien determinaría la vuelta al estudio
de la banda, ya que el mismo seria quien insistiría a su padre por grabar o
reversionar canciones olvidadas. Wolfgang empezaría a revisar en el baúl de los
recuerdos y a encontrar viejas canciones que no fueron consideradas en su
ocasión, con la finalidad de que el nuevo Van Halen les diera una segunda
vuelta y en base a eso pudiesen grabar nuevo material. De hecho, al menos 7
canciones del disco, corresponden a mezclas y fusiones de viejas canciones
desechadas por el conjunto.
Ante todo esto, pensaríamos que las cosas irían de buena
manera, sin embargo, el disco generaría una serie de divisiones entre los
fanáticos, ya que algunos lo considerarían un regreso más que sorprendente y
rescatable y otros cuestionarían su falta de creatividad (producto de las
reversiones) y que su finalidad esta forzada por un deseo de mantenerse vigente
y salir de gira; tal y como lo haría por ese mismo año Aerosmith con el
cuestionable Music from Another Dimension!
Uno de los singles del disco, Tattoo, se presenta con
las voces en eco de Lee Roth, repitiendo el nombre de la canción, para pasar a
un fraseo lleno de notas con sustain y gain aportados de la mano
de Eddie. Luego de esto, la voz de Lee Roth se mueve por la línea central en el
bajo de Wolfgang, quien es apoyado por una batería discreta, que trata de no
respetarle protagonismo a su sobrino. El coro es entretenido y repite frecuentemente
el nombre de la canción como un efecto de loop en el oyente. Debe ser el
tema mas comercial del disco, pero bajo este parámetro logra dejarnos una sensación
agradable y satisfactoria.
El mejor tema del disco, y otrora single del mismo, esta
representado por She’s The Woman, canción escrita originalmente en 1976,
cuyos principales cambios están en la guitarra. Bajo un comienzo en base a una línea
de bajo que se repite, mas unos fraseos sueltos de la guitarra, se mueve el
riff principal con la cómoda voz de Lee Roth. Lee Roth es quien proyecta la
mejor vibra a lo largo del tema, ya que se muestra comprometido y pleno en cada
una de sus líneas vocales. Eddie realiza una labor excelente tanto en el riff
principal como en su correspondiente solo. Sin embargo, lo más rescatable es el
coro que nos rememora a los primeros Van Halen. Un buen recuerdo al pasado que
deja la vara alta y nos deja con ganas de más.
Con ese sonido guitarrístico clásico de Aint Talkin' Bout
Love, pero de manera más pasiva va apareciendo You and Your Blues con
la voz de Lee Roth, a la cual se van incorporando, gradualmente, el resto de
los instrumentos. La canción se mueve por unos versos tranquilos hasta explotar
en los coros con la voz Lee Roth a tope, apoyada por los coros realizados por
Wolfgang, quien resulta de gran ayuda para remarcar la sección intermedia y
coro de la canción.
China Town comienza con un distorsionado solo de Eddie quien
nos muestra su virtuosismo en la guitarra eléctrica y técnica de tapping,
sin embargo, la pseuda calma dura un par de segundos, ya que a contar
del minuto 0:13 explota en una canción agresiva donde la voz de Lee Roth se
muestra grave y directa. Nuevamente, vemos a un Wolfgang que ayuda en las voces
y coros, además de complementarse con las voces duplicadas de Lee Roth y con el
bajo sonando con una crudeza digna de Motorhead. Puede parecer un tanto
repetitiva a ratos, sin embargo, Alex le da dinamismo a través de sus redobles
en la batería.
Con una distorsión acústica y un arpegio tranquilo comienza Blood
and Fire, la cual de poco va agarrando fuerza hasta convertirse en una canción
electrificada con el clásico sonido Van Halen. La voz de Lee Roth es
discreta y suave subiendo sus tonos, solamente, en el coro con esos We came!…
Si bien tiene cambios de rítmica para sus secciones intermedias, acompañada de
un virtuoso solo de Eddie, no logra generar gran relevancia y recuerdo auditivo
en el oyente.
Bullethead presenta un ritmo asesino y frenético, siendo
una canción prácticamente heavy metal, la cual nos muestra a un Lee Roth
inspirado y que se apoya, constantemente, en los coros para entregarnos energía.
La guitarra de Eddie presenta buenos cortes distorsionados apoyados,
principalmente, por los golpes agresivos de su hermano Alex en la batería. Eso sí,
el solo de la guitarra eléctrica es bastante extraño y experimental. Un tema directo
y a la vena.
Con los gritos de “One…Two…Three…Four” de Alex, al
estilo de The Ramones, comienza As Is, la cual parte con unos
redobles de batería acompañados por un riff industrial de Eddie. Todo
esto termina al minuto 0:40, con el paso a un riff acelerado al estilo de Get
Up, el cual se mueve por la voz de Lee Roth llevándonos a un coro que nos
recuerda a Hot For Teacher. Una canción que evoca las grandes canciones
del conjunto y nos sumerge en la nostalgia de los Van Halen más
agresivos.
Los sonidos de la guitarra de Eddie, que emulan sonidos
espaciales y extraterrestres, se mezclan con una voz en off hasta dar inicio a
un riff agresivo que tiene un sonido bastante grunge en Honeybabysweetiedoll.
La voz de Lee Roth, durante los versos, se mueve en virtud de este riff, y
también se logra apreciar el uso de voces duplicadas. Sin embargo, es un tema
experimental y que nos recuerda al tipo de canciones de Van Halen III,
un pésimo recuerdo y nube negra dentro de la discografía del grupo.
El Rock moderno nos llega de la mano de The Trouble With
Never, el cual a través de un riff dinámico se mueve por redobles de
batería y la voz camaleónica de Lee Roth. Durante sus versos, la voz del mismo
se muestra mesurada y, a ratos, se encuentra recitando la letra, hasta llegar
al coro, que resulta ser lo más rescatable a través del uso de voces corales.
Nuevamente, vemos el virtuosismo de Eddie, a través de un solo, que resulta ser
demasiado extenso en su duración y no aporta mucho más que servir de nexo a una
sección intermedia donde se aprecia a Lee Roth susurrar y susurrar.
La cosa mejora bastante con Outta Space, tema directo
y sin tapujos que muestra un riff propio del sonido Van Halen, el que se
mueve por un ritmo galopante y la voz enérgica de Lee Roth, quien nos presenta
un coro apoyado en voces corales y cortes secos en la batería. Esta vez,
tenemos un solo que cuenta con toda la esencia en calidad y duración de Eddie.
El Blues mezclado con el Rock N´ Roll, siempre han sido los
favoritos indiscutidos de Lee Roth; comprobado a través de su material solista.
Con una guitarra acústica y la rítmica señalada comienza Stay Frosty con
la voz de Lee Roth como foco principal a través de un juego de palabras y
sonoridades. A partir del minuto 1:10 comienza un ritmo electrificado basado en
un clásico ritmo de Rock N Roll al estilo Elvis Presley que nos hace
recordar al clásico cover de Poison “Your Mamma Don´t Dance”. Un
tema que suena con frescura y soltura, mayoritariamente, por Lee Roth quien
disfruta en su interpretación contagiando al resto de sus compañeros.
Big River tiene la esencia de She’s a Woman,
ya que si bien parte con un fraseo acústico, automáticamente decanta en un riff
electrizante y poderoso que se asemeja a la idea central del mencionado tema.
Adicionalmente, posee un coro similar en donde se menciona el nombre del tema
en cuestión. Una sección intermedia clásica con su correspondiente solo y
vuelta al riff inicial para finalizar. Sin embargo, no logra superar en calidad
e interés a su antecesora.
Con acordes con una gran ganancia en su amplificación, que
pudieran romper el tímpano, se mueve Beats Workin', conjuntamente con el
apodo de los redobles de batería, hasta caer en una sinfonía de melodías
inentendibles y aceleradas. Luego de esto, se proyecta un riff interesante en
la guitarra, pero en sus versos y coro baja la rítmica a algo más calmo y
tranquila modificando este singular riff a un mero acompañamiento de notas
aisladas. De todas formas, se rescata la sección instrumental a partir del
minuto 3:00 donde aparece Wolfgang Van Halen haciendo la línea central que
acompaña a los solos de su padre. Un final que deja con gusto a poco y que
debió ser, según mi parecer más enérgico, donde hubieran calzado canciones como
Bullethead, Outta Space o Stay Frosty.
Un trabajo que sin dudas marca un regreso, un tanto forzado,
de los Van Halen y compañía por mantenerse a flote y no quedar en el
olvido, sin embargo, se deben rescatar algunas canciones que conservan la
esencia del sonido clásico de la banda. Aun así, jamás olvidaremos el eterno
legado que deja la banda con trabajos memorables tanto en las voces de Lee Roth
como Van Halen, Women and Children First o 1984 y la voz de Hagar
como 5150, OU812 o Balance. Hasta siempre Eddie, tu legado en la
guitarra eléctrica y la música es invaluable!!!
“She got a doorbell sign that said, bring it or don't
ring it
She's the woman, she's the woman”